CMSTraducciones

Preguntas frecuentes

Si necesitas una traducción, ya sea simple o jurada, puedes enviarme un email a info@cmstraducciones.es en el que me expliques qué necesitas traducir y si tienes alguna fecha límite para la entrega de la traducción. Además, para acelerar el proceso, puedes enviarme el documento que necesitas traducir y lo analizaré para darte el mejor presupuesto y plazo posible. Si lo prefieres, puedes llamarme por teléfono o mandarme un WhatsApp al número +34 601614581 y explicarme todo lo que necesites, ¡estaré encantada de atenderte!

Los idiomas con los que trabajo son el inglés, el italiano y mi lengua materna, el español. Si tienes alguna necesidad de traducción en cualquier otro idioma, no dudes en preguntarme, ya que cuento con una red de traductores profesionales que estoy segura de que podrán ayudarte.

El precio de una traducción se calcula, normalmente, en función de una tarifa por palabra. Analizaré el texto que deseas traducir para ver el número de palabras que tiene y comprobaré si hay repeticiones para poder aplicar un descuento. Tras este análisis inicial, podré pasarte mi mejor presupuesto y plazo sin compromiso, siempre teniendo en cuenta tus necesidades. El precio de la tarifa por palabra dependerá de la complejidad del texto, de la urgencia, del formato del documento original, etc.

Cuento con herramientas de traducción que me permiten comprobar el número de palabras y las repeticiones que puede haber en un documento o entre varios archivos, por lo tanto, podré aplicar un descuento si es un texto muy repetitivo o si me envías varios archivos a la vez y tienen repeticiones entre ellos.

Asimismo, si comenzamos una colaboración que se alargue en el tiempo, estas herramientas me permitirán crear memorias de traducción con tus textos y aplicar descuentos en futuros proyectos si cuentan con repeticiones entre ellos.

Lo ideal es que me lo envíes en un formato editable como puede ser Word. Si solamente tienes el documento en formato PDF, no dudes en enviármelo y buscaremos alguna solución.

Si lo que necesitas es una traducción jurada, es importante que me envíes los documentos escaneados a color en formato PDF. Este archivo escaneado debe contener todos los sellos que aparezcan en el documento original (anverso y reverso).

La respuesta a esta pregunta siempre dependerá de muchos factores: la complejidad del texto, si es traducción simple o jurada, si es un texto muy extenso o no… Escríbeme a info@cmstraducciones.es o llámame al +34 601614581 y cuéntame cuál sería la fecha límite en la que necesitarías el documento traducido, así podremos buscar juntos la mejor solución.

¿Has oído hablar de la traducción jurada pero no tienes claro si es lo que necesitas? No te preocupes, ¡voy a intentar explicártelo!

La traducción simple es una traducción que no tiene ninguna validez legal y que se suele entregar en formato Word o PDF por correo electrónico. Este tipo de traducción se suele utilizar a la hora de traducir documentos jurídicos, económicos, comerciales, turísticos, etc.

Por otro lado, la traducción jurada es un tipo de traducción oficial que debe ser certificada por un traductor acreditado por el Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación. Es una traducción que tiene un carácter legal y que certifica que el contenido de la traducción se corresponde al 100 % con el contenido del texto original, por lo tanto, irá firmada y sellada por un traductor jurado nombrado a tal efecto.

Las traducciones juradas suelen ser imprescindibles a la hora de aportar traducciones ante organismos públicos, entidades oficiales, centros de estudios, tribunales, etc. Es también muy normal requerir la traducción jurada de contratos entre dos empresas para asegurar así la veracidad e imparcialidad del documento que se está firmando.

Los textos que suelen requerir traducción jurada son: actas y escrituras notariales, poderes notariales, certificados de nacimiento, certificados de defunción, antecedentes penales, títulos universitarios, expedientes académicos, etc.

No, la traducción jurídica no es lo mismo que la traducción jurada.

La traducción jurídica es una traducción simple de un documento del ámbito jurídico. Esta traducción no tiene ninguna validez legal y se suele entregar en formato Word o PDF por correo electrónico. Los textos que suelen requerir este tipo de traducción son: escrituras de constitución, estatutos sociales, contratos, testamentos, memorandos de entendimiento (MOU), sentencias de divorcio, etc.

Por otro lado, la traducción jurada es un tipo de traducción oficial que debe ser certificada por un traductor acreditado por el Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación. Es una traducción que tiene un carácter legal y que certifica que el contenido de la traducción se corresponde al 100 % con el contenido del texto original, por lo tanto, irá firmada y sellada por un traductor jurado nombrado a tal efecto.

Las traducciones juradas suelen ser imprescindibles a la hora de aportar traducciones ante organismos públicos, entidades oficiales, centros de estudios, tribunales, etc. Es también muy normal requerir la traducción jurada de contratos entre dos empresas para asegurar así la veracidad e imparcialidad del documento que se está firmando.

Los textos que suelen requerir traducción jurada son: actas y escrituras notariales, poderes notariales, certificados de nacimiento, certificados de defunción, antecedentes penales, títulos universitarios, expedientes académicos, etc.

En ocasiones, un texto de carácter jurídico puede requerir una traducción jurada si lo que se necesita es presentarlo ante un organismo público o jurídico (juzgados, tribunales, entidades oficiales…), pero no siempre una traducción jurídica requerirá este proceso.

La legalización es un acto administrativo por el que se otorga validez a un documento público extranjero. Esta legalización verifica la autenticidad de la firma que aparece en un documento y la calidad en que la autoridad firmante del documento ha actuado. La legalización no certifica el contenido del documento.

Entonces, ¿cuál es la diferencia entre la legalización y la Apostilla de la Haya? La Apostilla de La Haya es un trámite simplificado que sirve para que los documentos de carácter legal emitidos en un país sean reconocidos de manera automática por las autoridades de otro Estado. Solamente los documentos que provengan de un país que figure entre los más de 100 firmantes de este acuerdo de cooperación internacional podrán llevar Apostilla de la Haya. Los documentos que, por el contrario, provengan de un país que no esté incluido en el Convenio de la Haya deberán llevar otro tipo de legalización.

A no ser que exista algún instrumento jurídico que exima de esa obligación, todo documento público extranjero debe ser legalizado para tener validez en España y todo documento público español requiere ser legalizado para ser válido en el extranjero.

Los documentos públicos que suelen llevar apostilla o legalización son: actas notariales, certificaciones oficiales, autenticaciones de firma, certificados de fe de vida y estado civil, antecedentes penales, declaraciones juradas, etc.

Dado el creciente intercambio entre los distintos países del mundo, muchos Estados han firmado convenios destinados a facilitar este tipo de trámites a sus ciudadanos, entre ellos España. Por lo tanto, te recomiendo que visites la página del Ministerio de Asuntos Exteriores donde encontrarás información al respecto.

Este tipo de trámites depende del país emisor del documento original. Si tu documento original es de un país extranjero, en España puedes legalizarlo en embajadas o consulados de tu país de origen. Si, por el contrario, el documento original ha sido expedido en España, puedes solicitar la legalización al colegio notarial y ellos te podrán informar del trámite a seguir.